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Celebrando el Día de la Mujer: Una Conversación con Noelia Hernández, Instructora en Brok-air Aviation Academy
Entrevistamos a Noelia Hernández, ingeniera aeronáutica e instructora en Brok-air Aviation Academy. En la semana de la mujer, nos cuenta cómo fueron sus comienzos en una industria predominantemente masculina y el consejo que le daría a las jóvenes planteándose un futuro en la aviación.
Noelia, ¿qué te motivó a estudiar ingeniería aeronáutica?
Lo que tenía claro desde el instituto es que me iba a decantar por la rama de ciencias, posiblemente alguna ingeniería.
En mi entorno cercano nadie viene del sector de la aviación, pero a mi padre le apasionaba, y de pequeña iba muchos fines de semana a un antiguo aeródromo en Valencia donde mi tío y él volaban un avión RC de gasolina que ellos mismos construyeron.
También me llevó a probar el vuelo sin motor junto a mis hermanas en el aeródromo de Ocaña, que fue una experiencia maravillosa, a pesar de cómo se quedó el cuerpo tras las acrobacias :S y, principalmente, mi enorme curiosidad de cómo podían volar esos “artefactos”, diría que fue el resto de la ecuación.
Como mujer en un campo predominantemente masculino, ¿has enfrentado desafíos específicos en tu carrera? ¿Cómo los has superado?
En el año 99 empecé la carrera de ingeniería aeronáutica que, ya en sí, fue todo un reto; es verdad que anteriormente había sido una profesión tradicionalmente masculina y la única Escuela de Aeronáutica que había por aquel entonces estaba en Madrid y estuvo años ligada al ámbito militar (antigua Academia Militar de Ing. Aeronaúticos).
En la plantilla de personal docente solo en torno al 10 % son mujeres y, en las aulas, se reflejaba más de lo mismo.
Quizás uno de los primeros desafíos fue una vez me incorporé al mundo laboral, prácticamente recién “aterrizada” de la Escuela. Tras recibir una formación técnica del fabricante de aviones Airbus, me encomendaron en mi empresa impartirla a la plantilla de técnicos de mantenimiento, donde muchos de ellos ya tenían muuuchos años de experiencia (o, si no tantos, seguro más que yo, que no era difícil!) y yo recién me adentraba en el sector, con muchísimas ganas, pero acompañada de todos mis nervios a flor de piel… desde ahí, con el buen feedback de la experiencia y del personal, empecé a asumir poquito a poco nuevos retos profesionales que iban llegando.
Pero he de decir que he encontrado mucho apoyo en los compañeros de profesión y equipo de TMAs, que siempre me tenían muy en cuenta desde esos comienzos, pues me gustaba estar presente en la realización de algunas tareas e involucrarme en la medida de lo posible, conforme iba aprendiendo y conociendo mejor los sistemas del avión.
¿Hay alguna figura femenina en la aviación que te haya inspirado a lo largo de tu carrera? ¿Por qué?
Mi fuente de inspiración han sido las mujeres de mi familia. Aunque no han estado directamente vinculadas a esta industria, su constante esfuerzo, su capacidad para superar desafíos y su determinación han sido un valioso ejemplo. Verlas enfrentarse a la vida con valentía ha influido significativamente en mi enfoque hacia mis propios objetivos en la aviación.
A lo largo de mi carrera, además he podido conocer a bastantes compañeras con las que he trabajado, de las que hoy te puedo decir que, todas ellas, en mayor o menor medida, y antes o después en el tiempo, han sido y siguen siendo una inspiración en un entorno dedicado y exigente como es la aviación, y especialmente tras conocer de primera mano la magia y los «entresijos» de la maternidad y la relevancia de la conciliación de vida profesional y personal.
En esta trayectoria, he tenido la enorme suerte de trabajar particularmente en dos áreas de un operador, Planificación Central del Mantenimiento y Programa de Vuelos, lideradas ambas por mujeres, de las cuales aprendí muchísimo, ponían alto valor en las personas del equipo y me retaron fuertemente a salir de mis zonas de confort, grandísimas profesionales y mejores personas.
Habiendo pasado por diversas posiciones en la industria, ¿cómo describirías tu experiencia en términos de igualdad de género y oportunidades para las mujeres?
Es cierto que cada vez es más palpable el mayor interés u oportunidades, y la incorporación de mujeres a formaciones técnicas tradicionalmente masculinas, superando además estereotipos de género.
Sin embargo, la realidad actual es que en puestos de alta responsabilidad y «cúpula» directiva, la presencia femenina se sigue contando con los dedos de una mano, a pesar del notable aumento de las mujeres en el liderazgo corporativo, tras los esfuerzos y el compromiso de las empresas para potenciar la presencia de mujeres en procesos de promoción a puestos más altos, alineado con políticas enfocadas al equilibrio de género.
Como instructora en Brok-air Aviation Academy, ¿has notado un aumento en el interés de las mujeres por seguir una carrera de mantenimiento de aeronaves?
Bueno, poco a poco, se va dejando notar más la presencia de mujeres TMAs (Técnicos de Mantenimiento de Aeronaves), pero la progresión sigue siendo muy lenta en esta profesión y, como punto de partida, además hay déficit de estos profesionales a día de hoy.
En últimas promociones de alumnos, podríamos decir que el ratio de mujeres es 1/10, ¡y no siempre se cumplen las estadísticas! Espero que se siga incrementando, porque realmente es una profesión con mucha proyección de futuro y sería una lástima no lanzarnos igualmente a ello.
¿Qué medidas crees que podrían tomarse para fomentar este interés entre las mujeres?
Antes de todo, seguir dando a conocer más la profesión del técnico de mantenimiento y el amplio abanico de salidas profesionales que tiene, ya sea en el mantenimiento en línea de aviones, en las grandes paradas de mantenimiento, en el área de motores u otros componentes de aviación, como flying spanner…
Lo más habitual es que en el entorno del avión, las figuras que se asocian más fácilmente sea las tripulaciones, coordinadores…, pero es poco conocido el trabajo del TMA, independientemente de hombres o mujeres.
Desarrollar programas de mentoría que conecten a mujeres interesadas en la industria con mentoras experimentadas en programas de acompañamiento.
Por otro lado, la colaboración con organismos estatales para poder ofrecer ayudas económicas en una formación con 100% de inserción laboral, alineada con políticas de igualdad de género.
¿Puedes compartir alguna experiencia sobre alguna alumna que haya pasado por la academia y haya seguido una carrera exitosa como Técnico de mantenimiento de aeronaves?
Desde el 2021 que entré como instructora en Brokair Aviation Academy, una alumna es la que ha finalizado su formación completa, y aunque está pendiente de obtener su licencia por los requisitos de experiencia que exige la autoridad competente, ya está trabajando donde ella misma ha elegido y estoy convencida de su éxito.
En tu opinión, ¿cuál es el papel de la educación y la formación en la superación de las barreras de género en la industria de la aviación?
Es FUNDAMENTAL para fomentar la igualdad de oportunidades, eliminar estereotipos, proporcionar habilidades necesarias e inspirar igualmente a nuevas generaciones de mujeres.
Además, dado que ésta es una industria muy dinámica, la formación continua es esencial para mantenerse al día con la última tecnología de los aviones modernos, y unos equipos diversos y capacitados será clave para enfrentar los desafíos cambiantes de la aviación.
¿Qué consejo darías a las mujeres jóvenes que están considerando una carrera en ingeniería aeronáutica o mantenimiento de aeronaves?
Si realmente es lo que les aPASIONa y a lo que les gustaría dedicarse en un futuro, ¡adelante!
Es un esfuerzo que, sin duda, vale la pena.
Mantente curiosa, disfruta el camino, desafía el “esto siempre se ha hecho así”, cada nuevo reto será gratificante
